Vender por Internet desde cero: la guía más completa sobre el tema
Descubre qué puedes vender por Internet, cómo tener un negocio virtual sin invertir dinero, cómo promocionar tus productos y mucho más.
Vender por Internet es una excelente oportunidad para quien desea empezar su propio negocio sin tener que salir de casa para hacerlo.
Sin embargo, muchas personas piensan, de manera equivocada, que empezar un emprendimiento online es algo fácil y que genera éxito de un día para el otro.
Lo primero que tienes que saber es que para alcanzar buenos resultados con las ventas por Internet es necesario planificar, trabajar y esforzarse un montón.
No existen milagros que harán con que te hagas rico rápidamente o sin ningún empeño.
Pero, si realizas un trabajo serio y estructurado, es muy probable que llegues a alcanzar tus principales objetivos, como tener más tiempo para estar con tu familia, poder trabajar mientras viajas, ser tu propio jefe, conseguir mayores ganancias y mucho más.
Para ayudarte, preparamos una guía completa con todo lo que necesitas saber para empezar a vender por Internet desde cero.
1. Entiende qué se puede comercializar por Internet
Lo primero que tienes que pensar cuando decidas vender por Internet es: “¿qué comprarán mis clientes?”.
Lo sabemos, ¡suena muy obvio! Pero es común encontrar a gente que se queja de no vender nada porque solo quiere ganar dinero con publicidad en su sitio.
Aunque esta sea una opción, no es la más recomendable, ya que son pocos los casos en que las personas consiguen éxito solo con ello.
Pero, entonces, ¿qué se puede vender por Internet? Seleccionamos las mejores opciones:
Consultoría
La consultoría es una excelente opción para quien conoce muy bien un determinado tema y se ha especializado en ese segmento.
¿Vamos con un ejemplo?
Imagínate que eres un experto en finanzas personales e inversiones. Puede ser que hayas estudiado para eso o que hayas adquirido conocimientos trabajando en una empresa del sector.
Lo importante es que sabes mucho sobre ahorros y gestión patrimonial y conoces las mejores estrategias para que las inversiones personales tengan alta rentabilidad.
Ahora imagínate que has creado un blog y un canal en YouTube con tips y pequeñas lecciones sobre el tema.
A lo largo del tiempo, utilizando estrategias para difundir tu contenido, has conseguido una audiencia fiel, que siempre lee tus posts, los comenta y participa de lives en tus redes sociales.
Esas personas están interesadas en tu contenido y puede ser que necesiten una atención más personalizada, un asesoramiento. Es decir, lo que puedes vender por Internet es una consultoría a personas que necesiten tu ayuda para mejorar sus finanzas personales.
Para atraer a tus clientes, un formulario en tu web puede ser suficiente. Y dicha consultoría puede realizarse personalmente o por videoconferencia.
El consultor hace un análisis de la situación de su cliente y lo ayuda a alcanzar sus objetivos, con la planificación y ejecución de acciones estratégicas.
Y aquí mostramos solamente un ejemplo, porque puedes ofrecer consultoría en diversos nichos de actuación, como moda, administración, marketing y muchos otros.
Servicios
Otra opción para vender por Internet son los servicios.
Supongamos que tienes muchos conocimientos de inglés y, como en el caso anterior, ofreces contenidos para personas que necesitan aprender el idioma.
Si tu audiencia confía en tus conocimientos y en tu capacidad didáctica, probablemente va a desear tener clases contigo, ¿verdad?
Y eso es exactamente lo que puedes vender: tus clases particulares, personalmente o por videoconferencia.
Lo mismo puede hacerse en diferentes segmentos: si tienes contenido online sobre desarrollo de softwares, puedes vender ese servicio (como la creación de una aplicación móvil, por ejemplo).
O si eres experto en arquitectura, puedes ofrecer proyectos también por Internet.
Esta modalidad de trabajo es conocida como freelance ¡Y existen muchas posibilidades y las ganancias pueden ser significativas! Conoce más sobre este mercado en el vídeo a continuación:
Sin embargo, el punto negativo de vender servicios (y también de la consultoría) es que sólo conseguirás atender a un número limitado de clientes: al fin y al cabo eres sólo una persona y tendrás que dedicar mucho tiempo a cada uno de ellos.
O sea, en estos casos no podrás escalar tu negocio.
Productos físicos
Los productos físicos también se pueden vender por Internet y son muy populares. Cada vez más las personas compran en sitios virtuales, porque es mucho más práctico que ir hasta una tienda física.
Esta es una buena opción para quien ya tiene una tienda offline y quiere llevar su negocio más lejos, o para quien desea empezar y vender productos sin tener expensas con el local (alquiler, gastos con luz y agua, etc.).
Para tener un e-commerce, necesitas una buena web, con fotos, descripciones y precios de tus productos.
Además, es necesario contar con una plataforma de pago y un equipo que se ocupe de toda la parte técnica que el website exige.
Pero también existen algunas plataformas que ya ofrecen toda la estructura básica de la tienda online, como Shopify.
Otro punto importante es que tendrás que lidiar con la gestión de tu stock y con la logística de los envíos.
Un tip interesante es hacer uso del drop shipment (en español, triangulación de envíos). En este caso, no necesitas tener el producto en tu stock: cuando el cliente haga el pedido lo repasas al mayorista, quien enviará la compra directamente al cliente.
Productos digitales
Los productos digitales, o infoproductos, son aquellos que se comercializan por Internet en formato digital, y se pueden consumir desde una computadora o cualquier dispositivo móvil como e-readers, tabletas y smartphones.
Los más populares son los cursos online (e-learning) y los libros electrónicos (ebooks), pero también existen otros, como las aplicaciones móviles, los congresos online y las plantillas descargables.
El público que consume infoproductos está creciendo cada vez más, por muchas razones. Mira algunas de ellas:
Las personas no necesitan salir de sus casas para realizar la compra.
Si es un producto como un libro, no es necesario esperar a que llegue, basta con hacer el download en pocos minutos o segundos.
Si es un producto como un curso, no es necesario enfrentar tráfico para mirar las clases y el alumno puede hacerlo todo a su ritmo, donde quiera y cuando quiera.
¡Los precios son muy atractivos!
Para quien decide vender por Internet ese tipo de producto, existen varias ventajas, como poder empezar con muy poca o ninguna inversión, tener un negocio escalable, poder trabajar en cualquier lugar y muchas más.
Para ser un infoproductor, es necesario desarrollar distintas actividades.
En el caso del profesor online, por ejemplo, es necesario definir el nicho de actuación, planificar el curso, crear los guiones, grabar los vídeos y promocionar el contenido en Internet.
La recomendación es tener una plataforma que se encargue de los pagos, que envíe el producto de forma automática al comprador y que ofrezca dos opciones: que el cliente descargue el producto o que tenga acceso a un área de membresías.
Cursos online
Los cursos online son materiales ricos, generalmente educativos, que cubren diversos temas, desde disciplinas convencionales hasta un curso de gastronomía, por ejemplo.
Como su nombre lo indica, este tipo de curso se consume exclusivamente en Internet, siendo el formato más común las videoclases.
Al contrario de lo que muchas personas piensan, no es necesario ser un maestro graduado para trabajar en el campo de los cursos online, siempre que tengas un conocimiento sobre un tema determinado y desee compartirlo con otras personas.
Por supuesto, esto se aplica sólo a los cursos libres, que no están vinculados a ninguna institución educativa. En estos casos, la escuela o la propia universidad es responsable de crear y distribuir el contenido.
El hecho de que sea un mercado democrático, sin embargo, no significa que no debas tener cuidado al crear tu material.
Al igual que cualquier contenido que se graba y se disponibiliza online, es necesario tener una rutina de pre y posproducción para garantizar que ese material atienda las necesidades de tu audiencia.
Puedes encontrar todos los detalles de la creación de un curso en línea en nuestra publicación completa sobre el tema.
Pero tenlo en cuenta, debes encontrar un comprador ideal para tu producto (también conocido como buyer persona) y buscar un tema que sea de interés para esta audiencia.
Además, deberás seleccionar buenas palabras clave para atraer compradores y también para producir contenido de calidad, desde el punto de vista del tema abordado, como también para la captura de imagen, audio y otros detalles técnicos.
Ebooks
El ebook es un libro en formato digital, que se puede leer en cualquier equipo electrónico, como una computadora, smartphone, lector electrónico (lector de libros digitales, como el Kindle) o tableta. También existe la opción de imprimirlo para el consumo convencional.
Este es un producto muy popular entre los emprendedores online porque es más simple y más barato de producir, incluso, puedes hacer este material aun sin conocimientos de diseño, utilizando sólo programas instalados en tu computadora.
Para el público, este formato también es interesante, ya que se puede consumir con un paquete de datos simple, a diferencia de los videos y otros formatos, que requieren Internet de buena calidad.
Aprende todo lo que necesitas hacer para crear tu propio libro electrónico.
Además de los cursos online (e-learning) y los ebooks, también hay otros, como aplicaciones móviles, congresos en línea y plantillas descargables.
Productos de terceros
Una buena idea para quien quiere vender por Internet sin preocuparse con la creación y gestión del producto es participar de un programa de afiliados.
Los afiliados promueven los productos de otras personas a cambio de comisiones. ¿Vamos con un ejemplo otra vez?
Imagínate que tienes un blog sobre vida sana y ejercicios físicos. La mayor parte de tu audiencia está interesada en perder peso, comer de forma saludable y practicar actividades que ayuden a quemar calorías.
Ahora imagínate que has descubierto un programa fitness online, con videoclases que el alumno puede acompañar desde su casa, realizando los ejercicios en su propio hogar.
Seguro a tu público le encantaría este producto, ¿verdad? Entonces lo que haces es recomendarlo en tu página, con un enlace específico.
Cada vez que alguien realice una compra y haya llegado al producto gracias al enlace que tú has publicado, recibes una comisión por la venta.
Marketplaces
Los marketplaces son páginas web de un segmento específico que reúnen productos de varios sitios y marcas en un único lugar.
El comprador puede elegir el producto que le parezca mejor, considerando sus características y precios.
Algunos ejemplos de ese tipo de venta online son Trivago, Booking y Despegar.
Ese tipo de sitio es muy interesante para los compradores, porque no necesitan estar horas investigando el mejor precio y pueden realizar el pago directamente en la página.
Para quien quiere vender por Internet también puede ser una buena opción, ya que (como en el caso anterior) no es necesario desarrollar un producto específico.
Sin embargo, tener conocimientos de desarrollo web es imprescindible, al menos que contrates a alguien para hacer ese trabajo (que no es para nada barato).
2. Aprende a tener un negocio virtual sin necesitar invertir dinero
Si tu idea es vender por Internet sin enfrentar demasiados riesgos, puedes optar por tener un negocio virtual que no exija muchas inversiones iniciales.
La venta de productos físicos, por ejemplo, no es muy recomendable en ese caso. Sin embargo, vender servicios, productos digitales o productos de terceros puede ser una excelente opción para ti.
A continuación, seleccionamos algunos consejos para que puedas hacerlo:
Despreocúpate con la perfección
Probablemente quieres tener el producto perfecto antes de empezar a venderlo, ¿verdad?
Es normal querer ofrecer algo con una calidad excelente (y eso es lo ideal, claro).
Sin embargo, antes de saber si tu negocio realmente funciona, puedes comenzar con una versión más básica del producto, también conocida como MVP (producto mínimo viable). Este tipo de prototipo se puede construir con menos inversión y te permite probar la recepción del público para tu producto o servicio.
Si vas a crear un ebook, no necesitas contratar a un diseñador para que se ocupe de la parte visual. Puedes empezar con un modelo más simple y crear el ebook tú mismo, usando una de las 4 plantillas descargables de este enlace.
Otro ejemplo es el de los cursos online. Si vas a grabar una videoclase, obviamente quieres que la calidad sea la mejor posible. Pero, para empezar, no necesitas un estudio o una cámara súper profesional.
Si tienes una habitación en tu casa que sea bien iluminada y que tenga una pared neutra, sin muchos objetos y colores, puedes empezar por ahí.
Pero acuérdate de elegir un cómodo con poco ruido. Otra opción es hacer las grabaciones en un lugar de la ciudad que sea bonito y más tranquilo.
Además, es posible utilizar la cámara de tu smartphone, siempre y cuando tenga una calidad aceptable de imagen y audio.
Si quieres saber más sobre el asunto, te recomendamos nuestro post sobre cómo crear videoclases, que tiene muchísimos consejos sobre el asunto y un paso a paso completo para hacerlo.
Elige herramientas gratuitas para tu trabajo
Existen muchas herramientas excelentes para vender por Internet y varias de ellas son gratuitas (o tienen versiones básicas que puedes utilizar a un precio bajo).
Para difundir tu producto y captar clientes, por ejemplo, una buena opción sería utilizar Adwords, la herramienta de anuncios de Google para que tu sitio aparezca en los primeros posicionamientos de una búsqueda.
Pero, si no tienes dinero para invertir, puedes utilizar estrategias de SEO (Search Engine Optimization) para que tu web esté en la primera página de una manera orgánica, o sea, sin necesitar gastar dinero para eso.